sábado, 30 de junio de 2012

La batalla del centrocampismo


Poco queda de aquella Italia antigua, dogmática, inflexible, defensiva. Poco, o más bien nada, queda de aquel estilo de juego denominado Catennacio, tan exitoso pero a su vez tan criticado. Desde la llegada de Prandelli al banquillo nacional la Squadra Azzurra ha adquirido un fútbol atractivo, ofensivo, de calidad, de toque, con la defensa adelantada y con laterales y centrocampistas merodeando constantemente el área local. La Italia de Prandelli se caracteriza por jugar con paciencia, por buscar siempre el mejor receptor del balón y por trabajar duro por recuperarlo cuando éste les es arrebatado. Bailando al son de Pirlo, por decirlo de algún modo. Y es que si en algo ha sido muy inteligente el seleccionador azzurro ha sido en entregarle todos los galones al exquisito centrocampista de la Juve, sin duda uno de los mejores medio centros de la historia. Esta es la Italia que mañana se encontrará el combinado español. Un equipo que, entrenado por el criticado Vicente Del Bosque, no ha terminado de transmitir seguridad pese a haber llegado a la gran final sin perder un solo partido. Todo lo contrario que el equipo de los implarables Balotelli, Cassano, los infranqueables Buffon, Chiellini, Bonucci... quienes comenzaron la Eurocopa generando dudas y llegan al encuentro de mañana habiendo crecido muchísimo como conjunto. 

Cabe la duda de si Prandelli mantendrá su 4-3-1-2 habitual con Pirlo más liberado o recuperará el 5-3-2 que tan bien le funcionó en el primer partido ante España. Pienso, desde mi punto de vista, que mantendrá la defensa de cuatro y es que volver a los tres centrales conllevaría limitar a Pirlo, cortarle las alas, y obligarle a trabajar en una zona en la que se encuentra más bien maniatado. No obstante, la defensa de cinco sería probablemente muy beneficiosa para sus intereses ya que quedaría formada por los atrevidos Maggio (Nápoles) y Giacherinni (Juventus) y los insuperables Bonucci, Barzagli y Chielini, todos ellos de la Juve. Veremos qué decide el ex técnico de la Fiorentina pero me da la sensación que el once que sacará quedará formado por Buffon; Abate, Bonucci, Barzali, Chielini; Marchisio, De Rossi, Motta; Pirlo; Balotelli y Cassano. Con lo que no sólo se caerían los dos carrileros anteriormente comentados si no que también lo harían Montolivo y Balzaretti, que sí que jugaron ante Alemania (al contrario que Maggio y Giacherinni), en detrimento de Motta, de corte más guerrero y batallador, y Abate, lateral derecho diestro y puro. 

Pienso también que a Del Bosque le interesará acumular muchos hombre en medio campo para ganar así la batalla del centrocampismo a Prandelli y generar muchísima movilidad en ataque, algo fundamental en vista que los centrales italianos serán más bien de perfil alto, rocoso, posicional. Creo entonces que volverá a jugar sin un nueve puro para tratar de confundir a los centrales transalpinos, pese a que no vería con malos ojos que quien jugara fuera Torres, jugador que sobresale sobretodo ante defensas adelantadas y con campo para correr. Apostaría por un once formado por Casillas; Arbeloa, Ramos, Piqué, Alba; Busquets, Alonso, Xavi; Iniesta, Silva y Pedro. Pese a que tampoco resultaría descabellado que terminaran jugando Navas, Torres o Cesc. 

Mañana saldremos de dudas en una de las finales más igualadas, inciertas e impredecibles que recuerdo. Pero, ante todo, viva el fútbol.




IGNASI SALAFRANCA SORT

ignasisalafrancasort@hotmail.com

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martes, 26 de junio de 2012

Un equipo campeón

Por primera vez en mi corta carrera como entrenador, en mi tercer año al frente de un equipo (un Pre-Benjamín en 09/10, un Benjamín en 10/11 y un Alevín en 11/12), he logrado saborear una sensación jamás vivida. El éxito. Bien es cierto que en mis once años como futbolista del Club Escolapis Sarrià gané alguna que otra liga jamás, y cuando digo jamás es jamás, había tenido esa sensación de ver triunfar a unos chavales entrenados por mí. Una sensación maravillosa, inolvidable y, probablemente, irrepetible. Tras un año durísimo, en el que pese a ganar 20 de los 22 partidos disputados sólo hemos terminado tres puntos por encima del segundo, podemos decir a día de hoy que no sólo hemos quedado campeones de liga sino que hemos logrado un ascenso de división que nadie jamás nos podrá arrebatar. Una temporada apoteósica, como veis. No tengo más que palabras de agradecimiento hacia estos maravillosos chicos de 11 y 12 años y hacia sus padres, de algunos años más, que me han ayudado a crecer como entrenador, que me han hecho caso en todo momento y que han creído en mí des del primer día. De todo corazón, gracias. Voy ya con el uno por uno de la temporada.


1) Oliver Dobson: Sorprendente. Pese a no haber jugado jamás como portero, y es que hasta esta temporada destacaba por ser un más que digno jugador de campo, no sólo ha terminado como el arquero menos goleado de la liga sino que, además, ha permitido al equipo ganar el campeonato con intervenciones de gran mérito.

2) Albert Bargalló: Goleador. Pese a jugar toda la temporada como lateral derecho ha terminado la campaña con algo menos de diez goles, algo que sin duda resalta su valentía en ataque y su potente disparo desde fuera del área.

3) Albert Blanco: Admirable. Ser medio centro y marcar un gol o más en TODOS los partidos de la temporada es algo realmente increíble y de mucho valor. Centrocampista con carácter, muy polivalente, con mucho recorrido y una más que peligrosa llegada des de la segunda línea. Clave en el título.

4) Dani Giménez: Creciente. Pese a que comenzó la temporada generando alguna que otra duda en defensa ha terminado el año convirtiéndose en uno de los mejores marcadores del equipo. Imposible de superar por alto y difícil por bajo. Jugador disciplinado, muy profesional y con unas ganas tremendas de mejorar y aprender diariamente

5) Juan Urquia: Polivalente. Tener un jugador como él, que rinde en prácticamente todas las posiciones del campo, es un regalo caído del cielo. Futbolista de mucho trabajo y una más que necesaria actitud positiva. 

6) Carlos Monfort: Alegre. Dentro y fuera del campo, pero siempre con una sonrisa en la boca. Algo con lo que ha logrado levantar el ánimo equipo en los momentos más complicados de la temporada (por ejemplo los trascendentales partidos ante Collblanc y Lloreda). Además, brillante centrocampista con una más que admirable técnica y visión de juego.

7) Alex Correa: Pletórico. Lateral en sus inicios como jugador, extremo la temporada pasada, central en la actual. La que sin duda ha sido la mejor de su corta carrera. Rápido al corte, seguro por alto e insuperable por bajo, y con una más que lúcida salida de balón. Campaña espectacular y progresión imparable.

8) Bruno Gumà: Imprescindible. Líder y capitán del equipo en todo momento. En partidos y en entrenamientos, en las duras y en las maduras. Un ejemplo como jugador y como compañero. En términos futbolísticos un escándalo en defensa y en ataque. Derrocha potencia y calidad por todos lados. Increíble.

9) Alex Bosch: Trabajador. El tipo de jugador que todo entrenador quiere tener. Delantero trabajador, que no duda en ayudar en defensa, en sacrificarse por los compañeros, pero que además tiene gol y muchísima calidad.

10) Miquel Mendiguren: Determinante. Más allá de sus 60 o 70 goles a lo largo de la temporada Miquel ha destacado por sus inolvidables exhibiciones en los partidos más importantes. Sus dos goles in extremis en campo de la Salle (3-4), sus obras de arte ante el Vila Olímpica en la ida (3-5) y en la vuelta (4-4), entre otros. Temporada para la historia.

11) Albert Andrés: Necesario. Tranquilo, calmado, frío e inteligente. Perfecto para partidos tensos y de máxima igualdad. Parte importante del éxito final y es que sus mejores partidos se han visto en las últimas jornadas de la competición.

15) Dani Palacín: Profundo. Primer año como futbolista y temporada para enmarcar. Lateral profundo, directo, vertical, rápido e incisivo. Importante acumulación de pases de gol y de goles. Enorme y sorprendente campaña.




IGNASI SALAFRANCA SORT

ignasisalafrancasort@hotmail.com

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jueves, 21 de junio de 2012

Mi once de la fase de grupos




Habiéndose terminado ya la fase de grupos de la Eurocopa, que nos han deparado unos impredecibles cuartos de final entre Alemania-Grecia, Inglaterra-Italia, España-Francia Portugal-República Checa, llega el momento de idear un once formado por los jugadores que, en mi opinión, han sobresalido más en este inicio de competición.


Casillas: Pese al también buen papel de hombres como Hart, Buffon o Andersen creo firmemente que el portero del Real Madrid es, hasta el momento, el mejor de la Eurocopa. Y es que no sólo ha recibido únicamente un gol en lo que va de campeonato, inevitable por cierto, sino que además ha sacado ya a relucir su mejor repertorio de paradas.

Gusev: Junto con Gebre Selassie (República Checa) el mejor lateral derecho hasta el momento de la Eurocopa y de lo más destacable, y más sorprendente, de Ucrania. Correcto en defensa y de lo más correoso en ataque. Con calidad, profundidad y mucha llegada. Enorme Gusev.

Hummels: El gran triunfador de la presente Eurocopa. El central del Dortmund, para nada desconocido, ha dado en esta fase de grupos un recital de colocación, de anticipación, de dominio del juego aéreo y de una impecable salida de balón. No son muchos los centrales que juegan con la cabeza alta y que avanzan metros y metros con el balón en los pies. Hummels es uno de ellos.

Pepe: Pese al error inicial en el partido ante Alemania el central del Madrid está haciendo una Eurocopa de lo más admirable. Insuperable en defensa, anticipándose a los rivales como en sus mejores partidos y siendo uno más en ataque.

Chielini: Pese al buen papel de Coentrao y de Simon Poulsen, quien me ha encandilado, me resulta imposible obviar los tres partidos que ha completado Chielini, en los que ha dado un auténtico recital de marcaje al hombre y de anticipación. 

Polanski: En una Polonia ya eliminada Polanski ha sido, sin lugar a dudas, el jugador más destacado del combinado local. Inteligencia táctica, posicional, derroche físico en defensa y pocas complicaciones en ataque. En resumen, lo que sería el medio centro perfecto. Irreemplazable y es que, al fin y al cabo, los pocos minutos en que Polanski no ha estado sobre el terreno de juego han terminado siendo los que han condenado a su selección a caer eliminada.

Karagounis: Elegante, trabajador, eficaz, entregado, pasional. Estas podrían ser las cinco palabras para definir el enorme inicio de Eurocopa que se ha marcado el ya veterano (35 años) medio centro de Panathinaikos. No estará en cuartos ante Alemania, y estoy seguro que Grecia lo pagará caro.

Pirlo: Pese a que irregular, y es que con 33 años no se le puede pedir mucho más, Pirlo lo ha sido todo en esta Italia tan atractiva de la fase de grupos. Con su elegancia habitual ha guiado a la selección de Cesare Prandelli a mostrar su mejor fútbol de los últimos años. Eso sí, hacia el minuto 60/70, cuando el físico le ha dicho basta, el combinado italiano ha sufrido mucho para mantener el control del partido.

Iniesta: Junto con Silva y Casillas ha sido de lo poco destacable de España. Sí, de lo poco destacable y es que pocos jugadores me han convencido en estos primeros partidos más allá de los comentados anteriormente. Iniesta ha sido uno de ellos. Elegante, eléctrico, vitalicio y de lo poco directo y vertical del combinado español.

Mario Gómez: Hasta el momento el mejor delantero centro de la Eurocopa. Explosivo, imparable, goleador infalible e indefendible. Esta es la imagen que da Super Mario en estos primeros tres partidos de la Eurocopa en los que suma ya tres goles.

Mandzukic: De lo más destacado en este inicio de competición. Con Croacia ya eliminada, Mandzukic se mantiene como máximo goleador del torneo (junto a otros pocos) con tres goles que han permitido a su selección soñar hasta el último momento. Delantero completo, muy polivalente y con distintos recursos que le convierten en un jugador sorprendente, impredecible. 



IGNASI SALAFRANCA SORT


martes, 19 de junio de 2012

Hoy toca disfrutar


Hace escasos minutos, y no condicionado por la opinión popular, estaba convencido que Francia sería el rival de Italia en los cuartos de final de la Eurocopa y que Inglaterra recibiría a la dubitativa España en los que iban a ser dos grandes encuentros. Y lo creía porque veía en franceses e ingleses una clara, una abrumadora, una insultante, superioridad. Y no sólo por plantilla, donde tanto suecos como ucranianos no tienen nada que envidiar, sino sobretodo en experiencia, en estabilidad emocional y en el hecho de ser un bloque y no, de lo contrario, una suma de individualidades. 

Pero de repente, un cálido fuego de pasión ha renacido en mi interior al ver las novedades que sacaban no uno, ni dos, sino los CUATRO equipos que hoy librarán batalla en Polonia y Ucrania. Lo que parecía una partida de ajedrez claramente decantada hacia dos de las grandes potencias futbolísticas del momento se ha igualado de nuevo con la entrada en juego de algunos de los mejores jugadores, en mi opinión, de Suecia y Ucrania.

Por parte de una Suecia ya eliminada podría llegar a afirmar que por fin, pese a la baja de Rasmus Elm, me gusta el once titular. Lo que parece un 4-2-3-1 claro contará en ataque con dos bandas rápidas e incisivas, como Larsson y la gran novedad, el rapidísimo zurdo Bajrami, y con el gran trecuartista llegador Toivonen. Y gracias a Dios, al fin, tras dos partidos cometiendo locuras, Hamrén decide alinear a Zlatan Ibrahimovic allá donde le corresponde, donde más rinde, como nueve puro y solitario. Su rival, Francia, pierde, a priori, atractivo con la cautelosa baja de Cabaye por molestias. Por suerte, su sustituto será ni más ni menos que el prometedor Yann M'Vila, uno de los medio centros más completos y maravillosos del fútbol mundial. Y arriba, en banda y como mediapunta, llega lo realmente bueno. Ben Arfa, tras una temporada espectacular en el Newcastle, entra por primera vez en el once en detrimento de Menéz. Lo dicho, Francia lo tiene todo para ser primera de grupo pero ojo con Suecia que, pese a estar ya fuera de la Euro, saca un equipo más que competitivo.

Inglaterra, con un Rooney ya disponible tras haber superado la sanción que le ha impedido debutar en la presente Eurocopa, parte como clara favorita ante la local Ucrania, un equipo muy compacto pero que, hasta hoy, no ha destacado por contar con grandes nombres más allá del mítico goleador, pese a que ya mayor, Shevchenko. Sí, hasta hoy, y es que para recibir a los pross Blokhin ha decidido indultar a los castigados Rakitskiy y Milevskiy y hacerles debutar en la actual edición de este torneo. En detrimento de Shevchenko, sí, pero poder ver en acción a Rakitskiy (central de futuro) y Milevskiy (muy buen delantero) además del bueno de Pyatov, del siempre cumplidor Gusev, del crecido Tymoshcuk y de los siempre atractivos Konoplyanka y Yarmolenko, vale la pena. En frente una Inglaterra que contará con su mejor arma en ataque, Rooney, con lo que pasará de ser un equipo relativamente mediocre a ser un claro candidato a golear. Lástima, eso sí, de la suplencia de Carroll.

A disfrutar. Hoy toca, y mucho.



IGNASI SALAFRANCA SORT


sábado, 16 de junio de 2012

El drama de Kuba

Cuando el pasado martes Jakub Blaszczykowski marcó el gol del empate polaco ante Rusia y alzó las manos al cielo muchos intuyeron el carácter simbólico de aquel gesto tan y tan repetido por los futbolistas de hoy en día. Pero para el joven polaco, de 26 años, aquello significaba el recuerdo de algo mucho más cruel,  más duro, más traumático. Significaba viajar atrás en el tiempo y volver de nuevo a un escenario que jamás olvidará. La muerte de su madre. 


El pequeño Kuba, tal y como le apodan cariñosamente en el Dortmund, tenía sólo 11 años cuando, tras una una acalorada discusión conyugal, vio como su padre Zygmunt apuñalaba repetidas veces a su madre Anna hasta causarle la muerte. Kuba dejó el fútbol, profundamente afectado por la tragedia, y no fue hasta un año después que, persuadido por su tío y ex capitán de Polonia Brzeczek Jurek, volvió a vestirse de corto para luchar por su gran sueño, ser profesional de este deporte y poder dedicarle todos y cada uno de sus éxitos a su madre.

"Sé que ese recuerdo me va a acompañar el resto de mi vida. Daría todo lo que fuera a cambio de que mi madre estuviera viva. Lo que ocurrió dio un giro de 180 grados a mi vida. Fue como si una roca hubiera caído sobre mi cabeza y una semana después despertara y tuviera que volver a comenzar con mi vida y sobreponerme a todo como si nada hubiera ocurrido. Nunca entenderé lo que pasó ni la razón por la cual pasó", confesaba el propio jugador hace poco en una televisión polaca.

Y en unas horas volverá a ponerse la camiseta rojiblanca para jugar uno de los partidos más importantes de la historia futbolística de Polonia. Deben ganar a la República Checa si quieren superar la fase de grupos, clasificarse para la siguiente ronda, y seguir viviendo el sueño de llegar lo más lejos posible en su Eurocopa. De bien seguro que la madre de Jakub Blaszczykowski, desde lo más alto, hará posible que su hijo siga liderando al combinado nacional hasta el final. Sin duda, lo merece.







IGNASI SALAFRANCA SORT



jueves, 7 de junio de 2012

Manolo, gracias















Hoy hace dos días le comentaba a mi padre, recién llegado del trabajo, que Manolo Preciado había fichado por el Villarreal. La reacción de éste, quién me inculcó su devoción por Preciado, fue la esperada: "Da por hecho que les subirá a Primera, no tengo ninguna duda". Y lo dijo con una sonrisa en la cara, con los ojos brillantes y vidriosos tras oír que su ídolo de los banquillos, su referente en la vida, volvía a entrenar a un equipo español. 

Digamos que mi padre no le conocía personalmente, bien es cierto que un día se lo encontró en una terraza y tuvieron una breve charla, pero su admiración, y en el fondo la de todos, va más allá del trato cercano y humilde de Manolo, su admiración se resumía en el modo cómo había superado los duros palos que le dio la vida y en cómo, aún así, logró todo lo que logró en su carrera como entrenador. El profundo sentimiento de vacío que tenemos hoy, la pregunta que todos nos hacemos, podría resumirse en: ¿Qué somos los demás ante un hecho como el ocurrido hoy noche? No somos nada. No sabemos nada de la vida, nada. Manolo, permítanme tutearle como si de siempre le conociera, se encontró cara a cara con la parte injusta de la vida. Con el capítulo despreciable que de vez en cuando a todos nos toca vivir. Pero se lo encontró seguido, con escasos años para superarlo y de la forma más terrible posible. Pero siguió adelante. Pese a perder a su mujer por culpa del cáncer, a su hijo pequeño en un accidente de moto y ver morir a su padre, el año pasado, arrollado por un coche, no se rindió y, tras mirar al cielo, decidió crecer con el lema que por mucho que pierdas a un hijo tienes otro que se merece que sigas luchando. 

Y hoy se nos va. Cuesta de creer pero ya no está, se fue para no volver. Aquel que tanto nos enseñó, que tanto nos hizo llorar, reír, aprender, crecer, nos deja un legado que jamás nadie podrá recoger. ¿Qué nos queda? Un sinfín de frases y de recuerdos que de bien seguro serán inolvidables para todos. Aficionados al fútbol, simples ciudadanos. Todos le echaremos de menos. Sin discriminación alguna. Porque hoy no nos deja un ex futbolista ni un entrenador, hoy nos deja un hombre admirable, carismático e inigualable. Manolo, fuiste un ejemplo en vida y lo seguirás siendo allá donde estés. Pero sobretodo gracias, gracias por enseñarnos que la vida puede ser maravillosa pase lo que pase. Mil gracias.