Los primeros puntos para el Espanyol en la Liga 2010/11 llegaron ayer tras la agónica victoria ante el Athletic de Bilbao en un partido en que los de Bielsa no sólo tuvieron ocasiones para empatar sino que además hubieran podido terminar venciendo.
El encuentro comenzaba a las 22:00 del domingo, horario inusual en la competición española, en Cornellá-El Prat, estadio que reunió unos 21.000 pericos dispuestos a ayudar a su equipo animando sin cesar. El partido se presentaba interesante y es que ambos equipos salían con onces llenos de toque y calidad. En el Athletic sorprendía la inclusión de Gurpegui en el lateral derecho en lugar del internacional Iraola y la alineación del joven Íñigo Pérez en el izquierdo, también llamaba la atención el ver al polivalente De Marcos en el doble pivote junto al poderoso Javi Martínez. Pochettino no introdujo ningún cambio llamativo más que reafirmar la titularidad de Cristian Álvarez en detrimento de Kameni además de hacer jugar a Sergio García en lugar del ya jugador del Zaragoza Luis García y al nuevo fichaje Juan Albín en el puesto de interior zurdo. Dos equipos con una misma filosofía de juego, mimar el balón y tener la posesión.
El partido empezó siendo dominado por el conjunto de Bielsa con un par de remates de Gabilondo y un trallazo de Ander que pusieron a prueba al guardameta y capitán del español. Además, Velasco Carballo se mostró riguroso al enseñar tarjeta amarilla a Javi López y a De Marcos. Pocos después, en el minuto 14 la guinda del pastel, Thievy entraba en lugar del lesionado Albín. Sustitución que terminaría siendo decisiva ya que el joven delantero daría a su equipo un aire nuevo. De sus botas saldría el primer gol del partido, cuando más apretaban los vascos Thievy vio el desmarque del dinámico Álvaro y le puso un balón en profundidad para que éste centrara a la cabeza de Sergio García que, ante la pasividad del defensor Íñigo Pérez, anotaba el primer gol. A partir de entonces se animó el Espanyol, que pudo marcar el segundo pero que salvó Iraizoz con una buena estirada. Y que sobre todo fue un equipo mucho más alegre gracias al dinamismo de hombres como Thievy y Álvaro. En el 35’ y en el 37’ el Bilbao pudo empatar tras dos uno contra uno. De Marcos mandó el balón a las nubes cuando lo tenía todo para marcar y Llorente se encontró con un pletórico Cristian, que le sacó una mano impresionante para evitar el gol. Con el 1-0 se llegaba al descanso. Tiempo que aprovecharía el técnico argentino Marcelo Bielsa para dar entrada a Iturraspe en lugar de Íñigo y a Susaeta en lugar de Gabilondo.
El inicio del segundo periodo resultaría ser una pesadilla para los locales. En el minuto 48’ el recién entrado Iturraspe mandaría un aviso al disparar desviado a la izquierda del marco perico y sólo un minuto después el propio dorsal ocho visitante obligaría a estirarse al guardameta argentino. En el 54’ gozaríamos de una de las mejores paradas de la noche, tras una falta que le valió la amarilla a Sergio García sería Susaeta quien mandaría un tiro colocado a la escuadra blanquiazul. Parecía gol seguro hasta que apareció la mano salvadora de Cristian Álvarez para impedirlo. Y no fue hasta el 62’ que los de Bielsa conseguirían lograr la igualada tras un córner que remataría Fernando Llorente a la escuadra perica. Poco le duró la alegría al Athletic y es que Sergio García, de nuevo, aprovecharía diez minutos más tarde un error de Gorka para firmar el 2-1 que terminaría siendo definitivo. Hasta el pitido final poco más, el partido moriría con el Bilbao colgando balones al área del Espanyol a la espera de que la cabeza de Llorente les diera un punto que jamás llegó. Primeros tres puntos para los pericos, Cornellà sigue siendo un fortín.
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