Mourinho es tema de conversa diario en España y sobretodo, en Barcelona. Se lo ha ganado a pulso sin duda. Sus provocaciones, insultos, faltas de respeto, modos de atraer la presión, han sido constantes pero, si bien es cierto que en ocasiones se ha pasado de la raya, éste no ha sido el caso de su último percance.
Hagamos memoria. El pasado domingo, tras la derrota ante el Levante, el técnico portugués destacó que Khedira había caído en la trampa y en las provocaciones de los jugadores granotas. Pero Mourinho no acusó ni señaló en ningún momento al centrocampista alemán como culpable de la derrota, simplemente quiso enfatizar que habían caído en la trampa del conjunto local. Y con ello pretendía remarcar que el Levante se había pasado el encuentro calentando a sus jugadores con la intención que estos se rebotaran y fueran amonestados. Además, mandó un aviso a la afición y a la plantilla que esta temporada estarán solos en la batalla y que serán muchos los equipos que les pondrán trampas con intención de que caigan y se lastimen. Sólo así Mou podrá emerger cómo líder del equipo, cómo Mesías salvador al que todos deben seguir. Mourinho en estado puro.
IGNASI SALAFRANCA SORT
ignasisalafrancasort@hotmail.com
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